¡Actúa como líder saludable en tu día a día!

Este es el cuarto post de la serie de Liderazgo saludable; en anteriores post te desafiamos a mejorar la salud psicológica de tus colaboradores así como a incluir la «agilidad» en la gestión de personas y talento, y a comprender a qué te enfrentabas.  Ahora, en esta ocasión, te retamos para que pases a la acción con el siguiente Desafío 4: Actúa como líder saludable en tu día a día.

Sabes ¿cómo actuar como líder saludable en tu día a día?, ¿quieres conocer las CLAVES?

¿Me acompañas? Partimos…

 

Las personas trabajadoras, mandos intermedios o directivas/os de cualquier Organización hemos sentido estrés, o cualquier otro síntoma, derivado de este “nuevo contexto” laboral (COVID´19, VUCA, nuevas modalidades laborales, etc.). Sabes ¿quiénes lo han sentido en un nivel máximo?… ¿Ya lo tienes?, pues si, son ¡los profesionales sanitarios!

Te propongo aprender de las personas de profesiones sanitarias, una vez más, ¡son un gran ejemplo! Gracias a sus Servicios de Prevención y apoyo al empleado, lo han gestionado, en la mayoría de las ocasiones, de manera ejemplar. Recientemente, el INSST ha publicado su Guía de Buenas prácticas de intervención psicosocial en centros sanitarios.

Una vez pasada la gran ola de esta crisis vivida, estás a tiempo de actuar sobre el impacto que ha tenido en las personas colaboradoras, en algunas ocasiones “demoledor”. Como conoces, la percepción del bienestar laboral está condicionado por diversas variables. ¡Comienza tu reto actuando sobre las que afectan al bienestar psicológico de tu equipo!

¿Cómo? Sigue estos 3 pasos:

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Líder saludable paso a paso mejorando salud psicológica de los colaboradoresParece sencillo, vayamos poco a poco, para actuar sobre seguro

Mira al futuro: Planifica qué quieres hacer para mejorar el liderazgo saludable.

Crea tu propio plan de liderazgo saludable (PLS). Determina las actuaciones en dos niveles, organizacional e individual.

Explica el compromiso de la organización con la salud psicosocial de su plantilla. Una organización que cuida es una organización bien valorada y genera un mayor compromiso de su personal

A nivel individual:

empieza por ser responsable de tu salud psicológica, dando ejemplo y sensibiliza acerca de la co-responsabilidad sobre el bienestar laboral, ¡lo creamos entre todas y todos!

Promueve y solicita tu capacitación activa y preventiva en salud psicológica en el contexto laboral (tus compañeros M.I., gerentes y colaboradores también tendrían que disfrutar de formación / capacitación).

¡Actúa como líder saludable en tu día a día!

Saca sabor al pasado: Comparte las experiencias vividas, y su impacto.

Muestra interés por la salud psicosocial de tus colaboradores. Para minimizar el factor de riesgo “interés por el trabajador/compensación”, valora conjuntamente las compensaciones tangibles e intangibles que siente el colaborador que merece tras el esfuerzo realizado en situación de crisis. De esta manera puedes potenciar el compromiso de las personas contigo y con la Organización. Potencia el reconocimiento al trabajo y al esfuerzo personal.

Identifica con tu equipo el impacto de las condiciones psicosociales de riesgo a las que estuvieron expuestos durante la situación de crisis (circunstancias de trabajo especialmente intensas, inseguridad laboral, elevada carga de trabajo, el riesgo de contagio, elevadas demandas emocionales, entre otras…). Trabaja activamente la percepción del riesgo de mandos y trabajadores

Reflexiona en equipo sobre la evidencia científica que demuestra que la exposición a estos y otros factores de riesgo psicosocial puede dar lugar a daños para la salud física. Si fuera necesario cuenta con un profesional del servicio de prevención para valorar situaciones particulares.

Reconoce a las personas involucradas en todos los niveles de acción, que han hecho posible estar ahora donde estáis. Todas las personas trabajadoras, los Mandos Intermedios, los técnicos informáticos y profesionales de RRHH, entre otros, tuvieron que afrontar con carácter urgente el cambio de modalidad al teletrabajo, o sufrir la pérdida temporal de empleo. Crea “espacios de agradecimiento” para exponer públicamente los mensajes de reconocimiento.

Anima a las personas colaboradoras a participar en el proceso de “vigilancia de su salud”, con especial atención a la salud mental, sobre todo aquellas personas que tuvieron que asumir nuevas funciones/tareas desde el principio.

Ofrece opciones de soporte psicológico al personal que lo necesite. Muestra el interés para buscar conjuntamente recursos de ayuda, para cada particularidad, facilitando herramientas para la gestión emocional (manejo de la ansiedad, manejo del estrés, gestión de conflictos, resiliencia, meditación, mindfulness, etc.)

Reconoce y valora la opinión y experiencia del personal en relación con la gestión de la situación de crisis.

¡Actúa como líder saludable en tu día a día!

Construye el presente saludable: fomenta la cultura preventiva centrada en la persona colaboradora.

Motiva a tu equipo con el logro de metas claras y concisas, da retroalimentación sobre los resultados obtenidos y ofrece reconocimientos. Un equipo motivado es sinónimo de éxito y salud individual y colectiva.

Fomenta la cultura de comunicación y transparencia creando un clima favorable y abierto a la manifestación de opiniones y propuestas de mejora. Crea canales para recoger aportaciones de mejora.

Utiliza la escucha activa y empática, ofrece información clara y transparente, genera comunicación bidireccional con diálogo constructivo, ten en cuenta sus opiniones y fomenta la participación efectiva. Aprende de cada persona. Las aportaciones ayudan al bien común.

Proporciona retroalimentación sobre cualquier aspecto para el que se haya solicitado la participación

Integra en tus reuniones un espacio para el reconocimiento del trabajo de los equipos. Valorar la importancia de cada puesto de trabajo reforzando la necesidad de sus tareas y promoviendo el trabajo colaborativo

Crea un canal de comunicación sobre Salud psicológica para tus colaboradores que puedan contar cómo se sienten con el “aislamiento” laboral, que sientan que no están solos y que otras personas sienten lo mismo, que sientan el apoyo del equipo.

Fomenta un programa preventivo de apoyo emocional con dos líneas: una de apoyo entre pares/iguales/compañeros (línea de ayuda mutua) y otra de línea de apoyo profesional (para el abordaje temprano de síntomas de estrés postraumático, ansiedad y depresión que pueden darse).

Efecto amortiguador de la ayuda mutua

Se ha demostrado el efecto amortiguador de la ayuda mutua en el contexto laboral sobre el estrés laboral. Es un recurso de apoyo emocional y social entre personas que comparten una serie de preocupaciones o problemas comunes, que buscan soluciones a sus dificultades.

Crea oportunidades de desarrollo y superación a nivel profesional para cada uno de los miembros de tu equipo. Apuesta por la formación. Sentir la evolución del crecimiento, es salud.

Promueve las buenas relaciones entre los miembros del equipo, fortalece la cohesión grupal. Crear juntos/as un ambiente de trabajo óptimo. Gestiona adecuadamente los conflictos, si se cronifican, pueden ocasionar efectos nocivos a nivel organizativo e individual.

Vela por la seguridad y salud laboral de cada persona. Muestra interés y cuida a tu equipo. Contribuye a establecer la claridad de roles, favorece la flexibilidad y autonomía decisional y temporal. Adapta el trabajo a la persona.

Intenta favorecer un clima de confianza, pide tu retroalimentación y podrás obtener una información fiable y cercana a la realidad. El comportamiento grupal será el que determine si estás siendo un líder saludable.

 

Después de estas indicaciones puedes pensar en salir corriendo, contratar a alguien especializado que lo haga, o derivar al Servicio de Prevención, tan saturado, en su día a día con muchas otras cuestiones que tú no puedes hacer.

Contratar talento externo para que desarrolle en el equipo un liderazgo saludable, cuesta seis veces más, que capacitar a los M.I. en estas nuevas habilidades que se requieren. La clave está en reciclarse para no estar obsoleto, dejarse ayudar por Apps que te permitan monitorizar la salud psicológica de tu equipo y la variación del clima laboral y ser útil en esta situación tan cambiante.

Las habilidades adaptativas que desarrolléis tú y tu equipo, gracias a tu liderazgo saludable y el fomento del autoliderazgo, siempre serán útiles. Las personas trabajadoras y tu organización, estaréis preparadas ante los posibles cambios venideros.

¡Actúa como líder saludable!

 

¿Te apuntas al desafío de incluir el Liderazgo saludable y ágil, para lograr el Reto del 2021 de mejorar la gestión de personas?

¿Preparado para abordar el Desafío 4: Actúa como líder saludable en tu día a día? ¡Mejora en tu día a día la salud psicológica de tus colaboradores!

Poco a poco, apostando por tus desafíos, podrás ir descubriendo y disfrutando de sus cuantiosos beneficios.

¡Te hace bien a ti, y haces bien a las personas con las que COMPARTES Vida!

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